lunes, 31 de mayo de 2021

28 DE JUNIO

1ª OPCIÓN. 

PRIMERA LECTURA. Génesis 18,16-33.

Intercesión de Abrahán.

16Los hombres se levantaron y dirigieron la mirada a Sodoma; Abrahán los fue a acompañar para despedirlos. 17El Señor se dijo:
-¿Puedo ocultarle a Abrahán lo que voy a hacer? 18Abrahán llegará a ser un pueblo grande y numeroso; por él serán benditos todos los pueblos de la tierra. 19Lo he escogido para que instruya a sus hijos, a su casa y sucesores, a mantenerse en el camino del Señor, practicando la justicia y el derecho. Así cumplirá el Señor a Abrahán cuanto le ha prometido.
20Después dijo el Señor:
-La denuncia contra Sodoma y Gomorra es seria y su pecado es gravísimo. 21Voy a bajar para averiguar si sus acciones responden realmente a la denuncia. 22Los hombres se volvieron y se dirigieron a Sodoma, mientras el Señor seguía en compañía de Abrahán.
23Entonces Abrahán se acercó y dijo:
-¿De modo que vas a destruir al inocente con el culpable? 24Supongamos que hay en la ciudad cincuenta inocentes, ¿los destruirías en vez de perdonar al lugar en atención a los cincuenta inocentes que hay en él? 25¡Lejos de ti hacer tal cosa! Matar al inocente con el culpable, confundiendo al inocente con el culpable, ¡Lejos de ti! El juez de todo el mundo ¿no hará justicia?
26El Señor respondió:
-Si encuentro en la ciudad de Sodoma cincuenta inocentes, perdonaré a toda la ciudad en atención a ellos.
27Abrahán repuso:
-Me he atrevido a hablar a mi señor, yo que soy polvo y ceniza. 28Supongamos que falta cinco inocentes para los cincuenta, ¿destruirás por cinco toda la ciudad?
Contestó:
-No la destruiré si encuentro allí los cuarenta y cinco.
29Abrahán insistió:
-Supongamos que se encuentran cuarenta.
Respondió:
-No lo haré en atención a los cuarenta.
30Abrahán siguió:
-Que no se enfade mi señor si insisto. Supongamos que se encuentran treinta.
Respondió:
-No lo haré si encuentro allí treinta.
31Insistió:
- Me he atrevido a hablar a mi señor. Supongamos que se encuentran veinte.
Respondió:
-No la destruiré, en atención a los veinte.
32Abrahán siguió:
-Que no se enfade mi señor si hablo una vez más. Supongamos que se encuentran allí diez.
respondió:
-En atención a los diez no la destruiré.
33Cuando terminó de hablar con Abrahán, el Señor se marchó y Abrahán volvió a su lugar.

Explicación.

18,16-22. Versos de enlace, no muy coherentes. Podemos imaginar un montaje de cine: Abrahán caminando con los dos personajes de la escolta para despedirlos (16); mientras el Señor ha quedado solo y piensa en voz alta. El monólogo da tiempo a Abrahán para volver: llega al sitio donde había quedado con el huésped, y éste se dirige al anfitrión. Antes de que éste responda y como dándole tiempo para pensar, nos muestra el narrador a los mensajeros camino de Sodoma. Entonces Abrahán se acerca para dialogar con su ilustre huésped.

               Lo que sigue hasta entrado el capítulo siguiente adopta un esquema judicial, que explica algunas incoherencias. Al juez ha llegado una denuncia (20); despacha funcionarios a comprobar si es cierta (21.22); sin interrogatorio, el juez va a proceder a la sentencia; pero antes concede la palabra a un defensor (17.23). Al no bastar la defensa, se pasa a la ejecución o condena (cap 19).

18,17 Compárese con Am 3,4-8.

18,18 Gn 12,2.

18,19 El patriarca como padre de la justicia y el derecho, es figura complementaria del "padre por la fe", según Gn 15 y Rom 4.

18,20-21 Aplica el esquema forense del juez que investiga: véase Dt 17,4-5. En otros textos se dice que Dios lo ve todo y no necesita averiguar: Sal 11,4-5; Job 34,24; Prov 15,3; Eclo 16,17-23.

18,23-33 Después del monólogo dramático en voz alta sigue un diálogo en doce movimientos. Caso extraordinario en el estilo bíblico. El diálogo devora la acción. Y el diálogo no empuja la acción, pues al final no sucede nada. Abrahán exagera el respeto para disimular la audacia; pero su audacia supone un alto grado de confianza previamente adquirida.
               El diálogo discute un problema ético y teológico: la suerte de los individuos en la comunidad y de la comunidad en relación con los individuos. Suponiendo que Dios rige la historia, ¿cuál es su responsabilidad en casos de conflicto? ¿Han de ser castigados justos con pecadores? (cfr. Ez 21,8-9). -No es castigo; o es castigo para unos, desgracia para los inocentes. -Pero sin complicidad en la culpa ¿han de compartir los inocentes la pena? (Ez 21,8s). Para salvar a los inocentes ¿no será justo dejar de castigar a los culpables?

              Compárese con las afirmaciones de Éx 34,7 corregida por Dt 7,9s; 24,16. También los textos proféticos de Jr 18,7-10 y Ez 14,12-20.

              En el último supuesto, el defensor va bajando el número y se detiene al llegar a diez. ¿Por qué no sigue? Jeremías rebaja hasta uno: 5,1; también Ez 22,30. Lo sumo será que uno pague por todos: Is 53; 1 Pe 2,22-25; 3,18.

18,25 He aquí la gran cuestión de la teodicea. Véase Sab 12,12-18. Que Dios es justo, también como juez, lo afirman muchos textos: Sal 33,5; 99,4; Job 34,10-13; etc. Hay que notar el tono apasionado de la pregunta: Abrahán rompe a hablar en una explosión de indignación ante la posible y colosal injusticia.

           En forma de alegato de un defensor en un proceso, Abrahán intercede por su sobrino y, a través de él, por los vecinos de Sodoma.

18,33 Al final no se salva toda la ciudad, pero se salva la familia de Lot. La solución de Dios es distinguir entre justos y pecadores.

SALMO. 103,1-4.8-11.

(Eclo 18,8-14) 

1Bendice, alma mía, al Señor 
y todo mi interior,
a su santo nombre. 
2Bendice, alma mía, al Señor 
y no olvides sus beneficios.
3ÉI perdona todas tus culpas, 
cura todas tus dolencias. 
4ÉI rescata tu vida de la fosa
y te corona con su bondad y compasión. 
 8«El Señor es compasivo y clemente, 
paciente y misericordioso».
9No está siempre pleiteando
ni guarda rencor perpetuo.
10No nos trata como merecen nuestros pecados 
ni nos paga según nuestras culpas.
11Pues como se eleva el cielo sobre la tierra, 
así vence su misericordia a sus fieles.

Explicación

103,2 "Beneficios": un uso de "retribución" benéfica raro, compartido sólo con 2 Cr 32,25 y dos proverbios impersonales. 

 103,3 El "perdonador": el verbo hebreo es raro en el salterio: 25,11, el adjetivo en 86,5, el sustantivo en 130,4. "Médico": Ex 15, 26 y otros. 

103,4 "Rescatador" título y acción frecuentes en ls 40-55: significa recobrar una propiedad o una libertad: rescate extremo, del poder de la Muerte. "Coronador": puede significar ceñir una corona o turbante y también, rodear protegiendo. Aquí encaja mejor el segundo significado.

103,9-10 Empieza el comentario con cuatro oraciones negativas, que no niegan los verbos, sino los adverbios. Acusa y pleitea, pero no perpetuamente; paga y castiga, pero no como merecemos. A la queja de Lam 5,20, a la pregunta de Sal 77,8 responde: "no para siempre"; el doble castigo de Is 40,1 lo corrige: "no como merecemos". La medida del castigo no es el delito, porque su justicia está temperada y superada por la misericordia. 

103,11-13 Las tres comparaciones ya comentadas. 
Transposición cristiana.
 Este salmo anticipa la revelación por Jesús de la paternidad de Dios, tema central del evangelio de Juan, Puestos a escoger, recordemos el padrenuestro, la oración en la cruz (Lc 23,34), la parábola del hijo pródigo, la revelación de Mt 11,25-27; Lc 10,21 s.  
 EVANGELIO. Mateo 8,18-22.
18 Al ver Jesús que una multitud lo rodeaba dio orden de salir para la otra orilla.

19 Se le acercó un letrado y le dijo:
                   - Maestro, te seguiré adondequiera que vayas.
                   20 Jesús le respondió:
                   - Las zorras tienen madrigueras y los pájaros nidos, pero el Hombre no tiene dónde reclinar la cabeza.
                  21 Otro, ya discípulo, le dijo:
                  - Señor, permíteme ir primero a enterrar a mi padre.
                  22 Jesús le replicó:
                  - Sígueme y deja que los muertos entierren a sus muertos.

EXPLICACIÓN.

18 - 22.        Evita la popularidad (18). La otra orilla, las regiones paganas. El letrado reconoce la superioridad de Jesús como maestro. El Hombre (lit.. "el Hijo del hombre"), con doble artículo, indicando unicidad y excelencia, la plenitud humana de Jesús, efecto de la bajada del Espíritu sobre él (3,16). La labor de Jesús es una pura entrega, sin hogar ni descanso. El discípulo ha de participar en la misión del maestro. El padre (21s) representa la tradición, el modelo al que hay que ajustarse. Enterrar al padre indica la veneración, el respeto y estima por el pasado que representa. Ha de desentenderse de ese pasado, romper con la tradición. Los muertos, los que profesan esas tradiciones; sus muertos, las tradiciones mismas. La tradición muerta engendra muertos.
 
2ª OPCIÓN.
 
Primera Lectura. 2 Timoteo 2,22-26

22Huye de las pasiones juveniles, esmérate en la rectitud y la fidelidad, en el amor fraterno y la paz con los que invocan al Señor limpiamente. 23Niégate a discusiones estúpidas y superficiales, sabiendo que acaban en peleas; 24y uno que sirve al Señor no debe pelearse, sino ser amable con todos; debe ser hábil para enseñar, sufrido, 25suave para corregir a los contradictores; puede que Dios les conceda enmendarse y comprender la verdad; 26entonces recapacitarán y se zafarán del lazo del diablo que los tiene ahora cogidos y sumisos a su voluntad.
 
Explicación.
 
Exhortación personal a Timoteo. Tema de la enseñanza (24) con toda dulzura frente a los contradictores (22-26). 

Salmo. 37,3-6.30-31

3 Confía en el Señor y haz el bien,
habita una tierra y cultiva la fidelidad;
4 sea el Señor tu delicia
y te dará lo que pide tu corazón.
5 Encomienda al Señor tu camino,
confía en él, que él actuará;
6 hará salir tu justicia como la aurora,
tu derecho como el mediodía.
 30 La boca del honrado medita la sensatez,
su lengua pronuncia el derecho,
31 lleva en el corazón la ley de su Dios:
sus pasos no vacilarán.
 
Explicación.
 
 37,3-4 Dos imperativos enuncian la relación con Dios. Confianza es genérico; en cambio "delicia" expresa una experiencia íntima: Job 22,26; Is 58,14. Dios responde a la confianza otorgando la petición. Aunque todavía no posean un terreno, deben "habitar", permanecer, no exiliarse, como los de Jr 39,10; su "cultivo" será por ahora la fidelidad al Señor.

37,6-7 "Encomienda"; es hacer girar algo para que pase a otro. "Tu camino": la conducta ética y práctica que piensa seguir. "Actuará"; forma intransitiva de particular eficacia aquí. "Tu derecho" negado y conculcado, lo sacará puntual como el sol y creciente hasta el zénit: cfr. Os 6,5, de modo que todos lo reconozcan: cfr. Is 58,10.
 
37,30-31 Se pueden leer como lema del salmo: un hombre honrado saddiq medita la sensatez hokma, su lengua expone el derecho mishpat, en el corazón lleva la instrucción tora de su Dios. Su actividad es sapiencial, su tema ético, animado de espíritu religioso. Sobre la ley en el corazón vénase: Is 51,7; Jr 31,33.
 
 
Evangelio. Juan 17,20-26

20. Pero no te ruego solamente por éstos, sino también por los que a través de su mensaje me den su adhesión:
21. que sean todos uno –como tú, Padre, estás identificado conmigo y yo contigo-, para que también ellos lo estén con nosotros, y así el mundo crea que tú me enviaste.
22. Yo, por mi parte, la gloria que tú me has dado se la he dado a ellos, para que sean uno como nosotros somos uno
23 – yo identificado con ellos y tú conmigo-, para que queden realizados alcanzando la unidad, y así conozca el mundo que tú me enviaste y que les has demostrado a ellos tu amor como me lo has demostrado a mí.
24. Padre, quiero que también ellos –eso que me has entregado- estén conmigo donde yo estoy, para que contemplen mi propia gloria, la que tú me has dado, porque me has amado antes que existiera el mundo.
25. Padre justo, el mundo no te ha reconocido; yo, en cambio, te he reconocido, y éstos han reconocido que tú me enviaste.
26. Ya les he dado a conocer tu persona, pero aún se la daré a conocer, para que ese amor con el que tú me has amado esté en ellos y así esté yo identificado con ellos.

EXPLICACIÓN.
 
 Oración por la comunidad del futuro (20-23). Jesús ensancha el horizonte de su comunidad a épocas sucesivas (20). Está seguro de que su obra continuará. El llamado mensaje del Padre (6.7) y mensaje de Jesús (14,23), lo es también de los discípulos. No es para ellos una doctrina aprendida ni han de proponerlo como algo a lo que están obligados; no se puede proponer el amor si no se vive; se comunica como experiencia y convicción propia. El mensaje produce la adhesión a Jesús, punto de referencia para todos los tiempos. El mensaje no es una teoría sobre el amor, sino la formulación de la vida y muerte de Jesús.

La petición de Jesús es la unidad (21), expresión y prueba del amor, distintivo de la comunidad; su modelo es la unidad que existe entre Jesús y el Padre, y es condición para la unión con ellos. Quienes no aman no pueden tener verdadero contacto con el Padre y Jesús. Se establece así la comunidad de Dios con los hombres; su presencia e irradiación desde la comunidad, a través de las obras que revelan su amor (9,4), será la prueba convincente de la misión divina de Jesús. No se convence con palabras, sino con hechos.

La gloria/amor del Padre (el Espíritu) que Jesús ha recibido (1,14) constituye al Hijo (1,32.34) uno con el Padre (10,30). La comunicación de la gloria (22) a los discípulos realiza en ellos la condición de hijos; la comunidad de Espíritu produce la unidad entre ellos y con Jesús y el Padre. La comunidad es el nuevo santuario. La realización plena del designio de Dios (23) depende de la existencia de la unidad, fruto del amor incondicional. Éste es el testimonio válido ante los hombres. Equivalencia entre gloria y amor del Padre. Los discípulos manifestarán a un Dios que es don de sí generoso y total (“Padre”).

IV. Conclusión (24-26). El término quiero (24) muestra la libertad del Hijo (13,3): su designio es el mismo del Padre. Estar con él (14,3) denota la condición de hijos. Contemplar su gloria equivale a experimentar su amor (1,14) y responder a él (1,16). Jesús ha realizado el proyecto de Dios (1,1; 17,5), que el Padre había concebido como expresión total de su amor, y cuya realización en Jesús preveía desde el principio.

Expone al Padre la diferencia entre el mundo que lo rechaza y él y los suyos (25), para que el Padre justo los honre (12,26). Resume Jesús el contenido de su oración (26). Alude a su actividad pasada (vv. 4.6) y afirma su propósito para el futuro (vv.1.5): manifestar el ser el Padre dando la vida. La cruz será la revelación plena y definitiva de la persona el Padre, manifestando todo el alcance de su amor.

Conocer al Padre a través de Jesús es la vida definitiva (v.3). Quiere que los discípulos sean iguales a él, que gocen del mismo amor del Padre que él ha gozado, para que su unión con ellos sea total.

SÍNTESIS.

El acontecimiento salvador es la muerte de Jesús, en la que el Hombre queda terminado (19,30) al actualizar plenamente su capacidad de amar, y que revela lo que es Dios mismo: amor total y gratuito al hombre (Padre).

Desde su plenitud, Jesús el Hombre-Dios, igual y uno con el Padre, puede comunicar la vida/amor que posee. El efecto de esa comunicación será doble: la unidad de los que participan de él, y su entrega a la difusión de ese amor/vida en el resto de la humanidad.

El amor produce en los hombres una calidad de vida que puede llamarse definitiva, pues no está sujeta a muerte. Esa vida se identifica con la condición de hijos de Dios, que nace de la experiencia del amor de Dios como Padre al experimentar en la propia persona la acción salvadora de Jesús.

El amor, que es don de sí, establece la relación interpersonal, que no se crea dando “cosas”, sino dándose uno mismo. En cualquier donación se ofrece la propia persona. De hecho, el bien del hombre no está en poseer “algo” sino a “alguien”, en poseer a Dios y a los demás. Pero esta posesión no se adquiere por conquista o compra, se recibe como don gratuito. Cada uno regala su vida a los otros, como el Padre, que es Espíritu/vida (4,24), da su Espíritu a Jesús (1,32), y Jesús se entrega y da su Espíritu a los hombres (10,11; 19,30). Cada uno es dueño de su vida, su máxima riqueza, para entregarla; de esa manera, todos tienen en común la riqueza de todos (17,10).

Se ve así el sentido del “servicio”. Es el don personal de todos a todos. No basta un servicio “objetivo” al hombre, sino uno que en lo objetivo lleve dentro el ofrecimiento de la persona. La existencia de la comunidad una es al mismo tiempo el origen y el término de la misión.

27 DE JUNIO

Primera Lectura: Sabiduría 1,13-15;2,23-24
1 13Dios no hizo la muerte ni goza destruyendo a los vivientes.
14Todo lo creó para que subsistiera;
las criaturas del mundo son saludables:
no hay en ellas veneno de muerte ni el abismo impera en la tierra. 
15Porque la justicia es inmortal.
2 23Dios creó al hombre para la inmortalidad
y lo hizo imagen de su propio ser;
24pero la muerte entró en el mundo por la envidia del diablo 
y los de su partido pasarán por ella.

EXPLICACIÓN.

1,13 Se remonta el autor al origen de la muerte, concepto de dos dimensiones: a) la muerte física, patrimonio de todo hombre 7,1 (cfr. Gn 2-3; Ez 18,28-32; Rom 5,12-21; b) Y la muerte escatológica, definitiva, propia de los malvados en este libro. Compárese con Is 45,7; Dt 32,39.  

1,14 Comentario libre a Gn 1: todo es bueno, impera la vida. Véase 2,22s.  

1,15 El autor lo rubrica con una de esas frases que evitan la precisión para cargarse de sentido. Frase lapidaria, triunfal, que va a dominar con su resonancia todo el libro.
2,23-24 Por el tema estos dos versos empalman directamente con 1,13-14, "el partido de la muerte". "Para la inmortalidad": como capacidad y destino, vinculado a ser imagen de Dios: Gn 1,26-27. El Dios de la vida comunica vida e inmortalidad a sus imágenes. "Diablo" llama el autor a la serpiente del paraíso (Ap 12,9 Y 20,2) o a la envidia homicida de Caín: véanse Jn 8,44 y Rom 5,12; Heb 2,14. Por todo el contexto se ve que el autor piensa en la muerte definitiva, no en la muerte que da paso a la vida, como es la del justo. 

Salmo 30:2,4-6.11-13

2 Te ensalzaré, Señor, porque has tirado de mí
y no has dado la victoria a mis enemigos.
4 Señor, alzaste mi vida del Abismo,
me hiciste revivir cuando bajaba a la fosa.
5 Tañed para el Señor, sus adictos,
dad gracias a su nombre santo:
6 Un instante dura su cólera,
toda la vida su favor;
al atardecer se hospeda el llanto,
al amanecer el júbilo.
11 Escucha, Señor, ten piedad,
Señor, socórreme.
12 Cambiaste mi luto en danza,
13b Señor Dios mío, te daré gracias siempre.

EXPLICACIÓN.
30,2 El verbo significa tirar de, jalar. El enemigo triunfante podría ser la Muerte personificada, como en Jr 9,20; Sal 49,15; Job 28,22.
30,4 "Bajar a la fosa" es expresión descriptiva corriente: Sal 28,1; 88,5; 143,7.
30,6 Alternativa: "su cólera inspirada ansiedad, su favor da vida". Compárese con Is 54,7.
30,12 Del luto ritual pasa a la danza festiva: Éx 15,20; Jue 11,34; 21,21.
30,13 "Por siempre": ¿qué significa esta frase en el horizonte mental del autor? Lo ha dicho en el v.7 y fue presunción. Esta vez la muerte no ha lanzado la carcajada del triunfo, pero al final cantará victoria (Sal 49,9). Si esta vez no ha sucedido, pronto bajará el orante a la fosa y ya no alabará a su Dios. Para él "por siempre" significa mientras viva: Ex 21,6; Lv 25,46.

TRANSPOSICIÓN CRISTIANA.

En el horizonte cristiano la última frase consigue la plenitud de sentido. Primero en Cristo (Jn 17), después en los cristianos. Pablo llama a la muerte "el último enemigo" (1 Cor 15,26) y anuncia su derrota final (1 Cor 15,56).
Segunda Lectura: II Corintios 8,7.9.13-15
7Tenéis abundancia de todo: de fe, de dones de palabra, de conocimiento, de empeño para todo y de ese amor vuestro por mí: pues que sea también abundante vuestro donativo.
9porque ya sabéis lo generoso que fue nuestro Señor, Jesús Mesías: siendo rico, se hizo pobre por vosotros para enriqueceros con su pobreza.
13No se trata de aliviar a otros pasando vosotros estrecheces, sino que, por exigencia de la igualdad, 14en el momento actual vuestra abundancia remedia la falta que ellos tienen, para que un día la abundancia de ellos remedie vuestra falta, y así haya igualdad, 15como dice la Escritura: "Al que recogía mucho no le sobraba y al que recogía poco no le faltaba" (Éx 16,18).

EXPLICACIÓN.
Exhortación a que sean generosos (7). Aduce, en primer lugar, el ejemplo del Señor: su generosidad sin límites es norma para el cristiano (8-9). Les pide también que muestren su coherencia con el propósito inicial (10-12). Apela finalmente al principio de igualdad; la situación económica de la comunidad de Corinto es mejor que la de Jerusalén; la solidaridad se impone. Cita de Éx 16,18; igual ración de maná para todos (13-15).

Evangelio: Marcos 5,21-43 o 5,21-24.35-43

(Mt 9,18-19; Lc 8,40-42a)
21Cuando Jesús atravesó de nuevo al otro lado, gran multitud de gente se congregó adonde estaba él, y él se quedó junto al mar.
22Llegó un jefe de sinagoga, de nombre Jairo, y al verlo cayó a sus pies, 23rogándole con insistencia:
-Mi hijita está en las últimas; ven a aplicarle las manos para que se salve y viva.
24aJesús se fue con él.  
La mujer con flujos: El Israel marginado (Mt 9,20-22; Lc 8,42b-48) 

24bLo seguía gran multitud de gente, apretujándolo. 
25Una mujer que llevaba doce años con un flujo de sangre, 26que había sufrido mucho por obra de muchos médicos y se había gastado todo lo que tenía sin aprovecharle nada, sino más bien poniéndose peor, 27 como había oído hablar de Jesús, acercándose entre la multitud, le tocó por detrás el manto. 28Porque ella se decía: «Si le toco aunque sea la ropa, me salvaré». 29Inmediatamente se secó la fuente de su hemorragia, y notó en su cuerpo que estaba curada de aquel tormento. 
30Jesús, dándose cuenta interiormente de la fuerza que había salido de él, se volvió inmediatamente entre la multitud preguntando:
-¿Quién me ha tocado la ropa?
3ILos discípulos le contestaron:
-Estás viendo que la multitud te apretuja ¿y sales preguntando «quién me ha tocado»?
32El miraba a su alrededor para distinguir a la que había sido. 33La mujer, asustada y temblorosa, consciente de lo que le había ocurrido, ,se acercó, se postró ante él y le confesó toda la verdad. 34Elle dijo:
-Hija, tu fe te ha salvado. Márchate en paz y sigue sana de tu tormento.  

Nueva vida para la hija de Jairo/Israel (Mt 9,23-26; Lc 8,49-56)  

35 Aún estaba hablando cuando llegaron de casa del jefe de sinagoga para decirle:
-Tu hija ha muerto. ¿Para qué molestar más al maestro?
36pero Jesús, sin hacer caso del mensaje que transmitían, le dijo al jefe de sinagoga:
-No temas; ten fe y basta.
37No dejó que lo acompañara nadie más que Pedro, Santiago y Juan, el hermano de Santiago. 38Llegaron a la casa del jefe de sinagoga y contempló el alboroto de los que lloraban gritando sin parar. 39Luego entró y les dijo:
-¿Qué alboroto y qué lloros son éstos? La chiquilla no ha muerto, está durmiendo.
40Ellos se reían de él.
Pero él, después de echarlos fuera a todos, se llevó consigo al padre de la chiquilla, a la madre y a los que habían ido con él y fue adonde estaba la chiquilla.
4ICogió a la chiquilla de la mano y le dijo:
-Talitha, qum (que significa: «Muchacha, a ti te digo, levántate»).
42Inmediatamente se puso en pie la muchacha y echó a andar (tenía doce años) .. Se quedaron viendo visiones.
43Les advirtió con insistencia que nadie se enterase y encargó que se le diera de comer.

EXPLICACIÓN.

5,21-6,1ª. Tríptico. La situación de Israel y la alternativa de Jesús.

a) 
(5,21-24a): La multitud judía acude a Jesús, el que ha roto con la institución, mostrando su descontento con ésta y aceptando el contacto de Jesús con los paganos (21). La multitud se desdobla en dos personajes: la hija de Jairo, que representa el pueblo sometido a la institución (jefe de sinagoga), y la mujer con flujos, que representa al pueblo marginado por ella (impura). El pueblo sometido a la institución (hijita del jefe de sinagoga; cf v. 42: doce años) está en peligro de muerte. El jefe de sinagoga (cargo) no encuentra remedio en su sistema y opta como persona (Jairo) por acudir a Jesús, el excomulgado por ella.  

b) (5,24b-34). Otra multitud, ésta de seguidores (lo seguía, cf.2,15) que no proceden de la institución judía (cf. 3,32.34; 4,10: «los que estaban en torno a él»: su cercanía y adhesión a Jesús están expresadas aquí por apretujándolo) (24b). Mujer impura por su enfermedad (Lv 15,25-30), enferma y estéril, que representa al Israel (25: doce años) marginado por la institución. Mientras ha aceptado la marginación que le impone la Ley, no ha encontrado solución. Ahora, mezclada con el grupo no israelita, viola la Ley que le prohibía tocar a Jesús (27-28). Es decir, los marginados de Israel encuentran en Jesús una alternativa a su situación (d. 1,39-45). La fuerza de vida que sale de Jesús, el Espíritu. Hija (cf. Sof 3,14; Zac 9,9: «hija de Sión»). A nivel narrativo, curación; a nivel teológico, salvación por la fe.  

c) (5,35-6,1): No hay situación desesperada para la fe. La muerte significa que este pueblo sometido a la institución, al abandonarla por no poder sufrir más su opresión, queda sin alternativa, sin acceso a Dios y excluido de su sociedad (d. 6,34). Jesús le ofrece la alternativa que necesita (35-36). Los tres discípulos que forman el primer grupo de la lista de los Doce, los más recalcitrantes (cf. 3,16s) (37). Las designaciones de la niña van cambiando: en boca de Jairo, mi hijita, dependencia y cariño (23); los emisarios,tu hija, dependencia (35); Jesús, la chiquilla, pequeñez, pero no dependencia (40.41), y muchacha (casadera), independencia, porvenir fecundo (41.42); Jesús, que le da vida y fecundidad, es «el Esposo» (2,19). La orden que nadie se entere, imposible a nivel histórico, muestra el sentido teológico de la perícopa. La inmadurez de este' pueblo hace que no pueda enfrentarse aún con las consecuencias de la adhesión pública a Jesús, tiene que crecer (que se le diera de comer).

26 DE JUNIO

 Primera Lectura. Génesis 18,1-15.

1El Señor se apareció a Abrahán junto al encinar de Mambré, mientras él estaba sentado a la puerta de la tienda, porque apretaba el calor. 2Alzó la vista y vio a tres hombres de pie frente a él. Al verlos, corrió a su encuentro desde la puerta de la tienda 3y prosternándose en tierra dijo:
-Señor, si he alcanzado tu favor, no pases de largo junto a tu siervo. Haré que traigan agua para que os lavéis los pies y descanséis bajo el árbol. 5Mientras, ya que pasáis junto a vuestro siervo, traeré un pedazo de pan para que cobréis fuerzas antes de seguir.
Contestaron:
-Bien, haz lo que dices.
6Abrahán entro corriendo en la tienda donde estaba Sara y le dijo:
-Aprisa, veintiún litros de flor de harina, amásalos y haz una hogaza.
7El corrió a la vacada, escogió un ternero hermoso y se lo dio a un criado para que lo guisase enseguida. 8Tomó requesón, leche, el ternero guisado y se lo sirvió. El les atendía bajo el árbol mientras ellos comían.
9Después le dijeron:
-¿Dónde está Sara, tu mujer?
Contestó:
-Ahí, en la tienda.
10Y añadió uno:
-Para cuando yo vuelva a verte, en el plazo normal, Sara habrá tenido un hijo.
11Sara lo oyó, detrás de la puerta de la tienda. (Abrahán y Sara eran ancianos, de edad muy avanzada, y Sara ya no tenía sus períodos), 12Sara se rió por lo bajo, pensando:
-"Cuando ya estoy seca, ¿voy a tener placer, con un marido tan viejo?"
13Pero el Señor dijo a Abrahán:
-¿Por qué se ha reído Sara, diciendo: "Cómo que voy a tener un hijo, a mis años"? 14¿Hay algo difícil para Dios? Cuando vuelva a visitarte por esta época, dentro del tiempo de costumbre, Sara habrá tenido un hijo.
15Pero Sara, que estaba asustada, lo negó:
-No me he reído.
El replicó:
-No lo niegues, te has reído.

Explicación.

18,1 El primer verso es introducción a manera de título.

18,1-15 Dioses que circulan por el mundo en figura humana, para poner a prueba la hospitalidad de los mortales y así premiarlos o castigarlos, son tema literario apreciado y repetido en la antigüedad (léase el episodio de Pablo y Bernabé en Listra, hch 14). El autor aplica el tema a Abrahán con maestría, pero intenta algo más que entretener o edificar. Para que la prueba funcione es indispensable la ignorancia del protagonista. Abrahán se encuentra primero con tres caminantes que pasan por allí mientras el calor aprieta. Saluda con respeto al que parece ser el jefe y humildemente les ofrece hospitalidad. Cuando ellos hablan, empieza a descorrerse el velo: como premio traen una promesa precisa que corrobora otras anteriores (cosa que no entiende Sara). Después Abrahán se queda a solas con el Señor.
          Para el lector no es necesaria la ignorancia. El narrador comienza con "se apareció el Señor", en v.13 lo identifica con Yhwh. E sel personaje principal, los otros dos son escolta angélica. La parte narrativa oscila libremente entre el singular y el plural. En la antigüedad cristiana se especuló con esa terna, hasta imaginarla como aparición de la Trinidad.

18,2 Heb 13,2.

18,3 El texto original decía probablemente "señores míos"; el texto actual vocaliza como si se tratara del Señor.

18,6-8 No es un humilde "pedazo de pan", sino un gran banquete. Según costumbre oriental, el que invita sirve y no come (cfr. el banquete de Mt 22,11 par Lc 12,37).

18,10 Rom 9,9.

18,12 La risa de Sara es de incredulidad. El autor sigue jugando con la raíz "reír" del nombre de Isaac. Al narrador le sirve para subrayar la esterilidad de los cónyuges y la fecunidad milagrosa.

18,14 Jr 32,17.


Salmo. Lucas 1,46-50.53-55.

46 Entonces dijo María:
-Proclama mi alma la grandeza del Señor
47 y se alegra mi espíritu en Dios mi Salvador,
48 porque se ha fijado en la humillación de su sierva.
Pues mira, desde ahora me llamarán dichosa todas las generaciones,
49 porque el Potente ha hecho grandes cosas en mi
favor: Santo es su nombre
50 y su misericordia llega a sus fieles
de generación en generación.

53 a los hambrientos los colma de bienes
y a los ricos los despide de vacío.

54 Ha auxiliado a Israel, su servidor,
acordándose, como lo había prometido a nuestros padres,
55 de la misericordia en favor de Abrahán y su descendencia,
por siempre.


Explicación.

Por boca de María pronuncia su cántico el Israel fiel a Dios y a su alianza (46-48), el que ha creído en las promesas. Alaba a Dios por su cumplimiento, que ve inminente por el hecho de la concepción del Mesías. Dios mi salvador (47; cf. Sal 24,1; 25,5; Miq 7,7, etc), título clave del cántico, cuyo tema va a ser la salvación que Dios realiza en Israel; la humillación (48): en el AT, estado de opresión de que Dios libra a su pueblo (Dt 26,7; Sal 136,23; Neh 9,9); grandes cosas (49): se decía en particular de la salida de Egipto (Dt 10,21) y de la liberación de Babilonia (Jr 33,3, segundo éxodo); sus fieles (50), representados por María, "la sierva" (Éx 20,6).

La acción liberadora va a consistir en una subversión del orden social: exaltación de los humildes (1 Sm 2,5.7s; 2 Sm 22,28; Sal 72,1-4.12s; 75,5; 107,9.40s; 147,6; Eclo 10,14, etc), caída de los opresores (cf. 6,21; 11,13; Job 15,29; Jr 17,11). Destinatario de la salvación: Israel su servidor (54) (Is 41,8s; 42,1; 44,1.2.21; 45,4) = "sus fieles" (50) = "su sierva" (48). Dios no ha olvidado su misericordia/amor (Sal 98,3), como podía haber sospechado Israel ante los numerosos desastres históricos que ha sufrido. Amor prometido a los padres/patriarcas (55) 

Evangelio. Mateo 8,5-17

5 Al entrar en Cafarnaún se le acercó un centurión 
6 rogándole:
                    - Señor, mi criado está echado en casa con parálisis, sufriendo terriblemente.
                   7 Jesús le contestó:
                   - Voy yo a curarlo.
                   8 El centurión le replicó:
                   - Señor, yo no soy quien para que entres bajo mi techo, pero basta una palabra tuya para que mi criado se cure.
9 Porque yo, que estoy bajo la autoridad de otros, tengo soldados a mis órdenes, y si le dijo a uno que se vaya, se va; o a otro que venga, viene; y si le dijo a mi siervo que haga algo, lo hace.
                  10 Al oír esto, Jesús dijo admirado a los que lo seguían:
                   - Os aseguro que en ningún israelita he encontrado tanta fe.
11 Os digo que vendrán muchos de Oriente y Occidente a sentarse a la mesa con Abrahán, Isaac y Jacob en el reino de Dios;
12 en cambio, a los destinados al reino los echarán afuera, a las tinieblas. Allí será el llanto y el rechinar de dientes.
                  13 Y al centurión le dijo:
                  - Vete; lo que has creído, que se te cumpla.
                  Y en aquel momento se puso bueno el criado.


14 Al llegar Jesús a casa de Pedro encontró a la suegra echada con fiebre, 
15 le tocó la mano y se le pasó la fiebre; ella se levantó y se puso a servirle.
                   16 Al anochecer le llevaron muchos endemoniados; con su palabra expulsó a los espíritus y curó a todos los enfermos,
17 para que se cumpliese lo que dijo el profeta Isaías:


                   El cogió nuestras dolencias
                   y quitó nuestras enfermedades. (Is 53,4).
 
EXPLICACIÓN.

5 - 13.         Vuelta a Cafarnaún (4,13). El pagano es también religiosamente impuro. La salvación es universal, no reconoce fronteras entre hombres o pueblos. No hay acción de Jesús con el enfermo, sólo palabra: alusión al mensaje que será predicado entre los paganos después de su muerte-resurrección. Contraste con la poca fe de Israel (11-12). El banquete, símbolo del reino de Dios. Los paganos se incorporan al Israel mesiánico.

14 - 17.    La fiebre, que impide el servicio/colaboración con Jesús, está en relación con el fuego (3,10.11.12; Eclo 48,1.3.9). La suegra representa, pues, al grupo con el que Pedro se ha vinculado y que profesa la concepción mesiánica del Bautista, la del Mesías juez que castigará a malvados y pecadores. Jesús intenta liberar a Pedro. Para la misión pagana el discípulo tiene que estar libre de su mentalidad nacionalista violenta. Fuerza de la palabra de Jesús (16). Mt adapta el texto del profeta. 

25 DE JUNIO

PRIMERA LECTURA. Génesis 17,1.9-10.15-22.
 
Alianza del Señor con Abrán (Gn 12; 15)  

1Cuando Abrán tenía noventa y nueve años, se le apareció el Señor y le dijo:
-Yo soy Dios Todopoderoso. Procede de acuerdo conmigo y sé honrado, 9Dios añadió a Abrahán. 
-Tú guarda el pacto que hago contigo y tus descendientes futuros. 10Este es el pacto, que hago con vosotros y con tus descendientes futuros y que habéis de guardar: circuncidad a todos vuestros varones; 

Sara  

15Dios dijo a Abrahán:
-16-Saray, tu mujer, ya no se llamará Saray, sino Sara*. La bendeciré y te dará un hijo y lo bendeciré; de ella nacerán pueblos y reyes de naciones.
17Abrahán cayó rostro en tierra y se dijo sonriendo:
-¿Un centenario va a tener un hijo, y Sara va a dar a luz a los noventa?
18Y Abrahán dijo a Dios:
-Me contento con que te guardes vivo a Ismael.
19Dios replicó:
-No; es Sara quien te va a dar un hijo, a quien llamarás Isaac; con él estableceré mi pacto y con sus descendientes, un pacto perpetuo. 20En cuanto a Ismael, escucho tu petición: lo bendeciré, lo haré fecundo, lo haré multiplicarse sin medida, engendrará doce príncipes y haré de él un pueblo numeroso. 21Pero mi pacto lo establezco con Isaac, el hijo que te dará Sara el año que viene por estas fechas. 22Cuando Dios terminó de hablar con Abrahán se retiró.

Explicación.

17,1. Todopoderoso: traducción tradicional de Sadday, cuyo significado no se ha aclarado todavía (véase Éx 6,3). La exigencia inicial se podría traducir o parafrasear así: procede honradamente / sinceramente conmigo, tenme presente en tu proceder íntegro.

17,9-10. Al patriarca y sus descendientes toca "guardar" el pacto ya otorgado por Dios. El modo de "guardarlo" consiste en llevar cada uno en su carne la marca de la pertenencia a su Dios.

17,16. Otro cambio de nombre: Sara = Princesa.

17,17. Sonriendo: no atreviéndose a creerlo, de puro gozo. Empieza el juego con el nombre de Isaac, cuya raíz escuchan los hebreos con el significado de reír, gozar, danzar, festejar: 18,12-15; 21,9; 26,8.

17,18. Lo que propone Abrahán es demasiado razonable y mezquino. El poder de Dios quiere revelarse en la impotencia humana.

17,20. Ismael gozará de una especie de patriarcado paralelo.


SALMO. 128,1-5.


1 iDichoso el que teme al Señor
y sigue sus caminos!
2Comerás de la fatiga de tus manos,
serás dichoso, te irá bien.
3Tu mujer como parra frondosa
en la intimidad de tu casa,
tus hijos como renuevos de olivo
alrededor de tu mesa.
4Ésa es la bendición del varón
que respeta al Señor.
5Que te bendiga el Señor desde Sión.
y gozarás de la prosperidad de Jerusalén,
todos los días de tu vida,
128 Género colocación. Bienaventuranza que canta la felicidad de la vida familiar en el contexto de Jerusalén e Israel. El paradigma de la dicha está expresado con el 
doble "dichoso" (1.2), el doble "bendecir" (4.5), el doble "bien" (2.5b) y el final "paz". Por su colocación, completa y corrige el precedente: menciona la esposa y exalta el valor del trabajo humano; no será "en vano" si lleva la bendición de Dios. La vida familiar está reducida a lo elemental: es monógamo y de familia numerosa. El padre atiende al trabajo, la madre a la casa; la mesa simboliza y realiza la unidad familiar.
Las dos imágenes son vegetales, parra y olivo; sugieren lozanía, fecundidad, crecimiento. Parra o vid es imagen tradicional: p. ej. Is 5,1-7; Ez 19,10s. En un segundo momento, tanto la vid como el olivo pueden simbolizar a Israel: Jr 11,16. A través de dicho simbolismo pasamos al final del salmo: Jerusalén es la madre, Israel son los hijos.
128,1 Son correlativos respetar al Señor y seguir los caminos que él nos traza.
128,2 Es bendición trabajar produciendo y disfrutar de lo producido: Is 65,21-23; Am 9,14.
128,6 Conocer a los nietos es señal de longevidad: Prov 17,6; Job 42,16.

Transposición cristiana.
 La clave se encuentra en el símbolo matrimonial de Cristo y la Iglesia, según Ef 5. También es aplicable al sacramento del matrimonio, que renueva la bendición genesíaca.
En clave escatológica: el cristiano disfrutará del fruto de su fatiga: Rom 8,18; Ap 14,13.

31 DE DICIEMBRE

Primera  Lectura de la 1ª carta de san Juan 2,18-21: 18Hijos, es un momento decisivo. ¿No oísteis que iba a venir un anticristo? Pues mirad ...