domingo, 31 de octubre de 2021

21 DE NOVIEMBRE

Primera Lectura: Daniel 7:13-14

13Seguí mirando y, en la visión nocturna vi venir en las nubes del cielo una figura humana, que se acercó al anciano y fue presentada ante él. 14Le dieron poder real y dominio: todos los pueblos, naciones y lenguas lo respetarán. Su dominio es eterno y no pasa, su reino no tendrá fin.

Explicación.

7,13. En la visión todo era figura, "como"; también en estse punto aparece una "figura humana" o "figura de un hombre". Sustituir la expresión aramea por "hijo de hombre" es calcar, no traducir. Compárese con el hebreo de Sal 8,5; Is 56,2; Jr 49,18.33; 50,40; 51,43; Job 35, con el arameo de Dn 4,22 equivalente de 5,21 y 7,8.13. Es una figura humana, contrapuesta a las cuatro fieras; no es un ser misterioso y celeste. No desciende, asciende; aunque desde el punto de vista del vidente, "viene".

7,14. El personaje recibe el poder antes concedido a Nabucodonosor (4,33; 5,18), sólo que eterno (como la piedra de 2,44).

Salmo Responsorial: Salmo 93:1-2, 5

1EI Señor reina, de majestad vestido,
el Señor, vestido y ceñido de poder.
Así está firme el orbe y no vacila.
2Tu trono está firme desde siempre,
tú eres eterno.
5Tus mandatos son eficaces;
a tu casa corresponde la santidad,
Señor, por días sin término. 
Explicación.
93 Es un himno al Señor Rey por su victoria sobre las fuerzas del caos y por la fundación del orbe. Por el planteamiento y desarrollo, se diría un texto polémico, frente a la mitología babilónica; en concreto, la victoria de Ea sobre el Apsu y de Marduk sobre Tiamat, por la cual Marduk es proclamado rey. La divinidad determina los destinos y pronuncia decretos irrevocables. El salmo estiliza la batalla primordial en forma casi hierática: Yhwh está por encima, inaccesible al tumulto.
El tema es cosmológico, no histórico. ¿Recuerdo mítico de un suceso metahistórico? ¿Repetición litúrgica cíclica? ¿Anuncio de una victoria escatológica? Sirvan como alternativas de lectura. A lo cual añadimos que la batalla cósmica puede funcionar como símbolo de batallas históricas (cfr. Sal 65,8).
93,1 Propone el tema de la realeza: compárese con Is 24,23; 52,7; Sal 47,9. Yhwh es rey, tiene una "casa" o palacio, se sienta en un "trono" estable, "se viste" el manto real," se ciñe" el fajín del poder, pronuncia "decretos" inmutables. El "orbe" está asentado sobre el océano subterráneo de agua dulce (Apsu ).
93,2 El "trono" es celeste: Is 6,1; 66,1 "Eterno" designa un tiempo indefinido.
93,5 Por el contexto, creo que se refiere a los decretos cósmicos, como en otros textos: Gn 1; Sal 148,6; Job 28,26; Jr 5,22; 31,35s.
Transposición cristiana.

 El evangelio presenta narrativamente la victoria de Jesús sobre las aguas: Mt 8,24-27par; alusiones escatológicas se leen en Lc 21,25 Y Ap 12, 15; 17,15. La violencia se desata contra Jesús, hasta la aparente victoria de su muerte; al vencerla con su resurrección se inaugura su reinado.
Segunda Lectura: Apocalipsis 1:5-8

y de parte de Jesús Mesías, el testigo fidedigno, el primero en nacer de la muerte y el soberano de los reyes de la tierra.
Al que nos ama y con su sangre nos rescató de nuestros pecados,
6 al que hizo de nosotros linaje real y sacerdotes para su Dios y Padre, a él la gloria y el poder por los siglos de los siglos, amén.
Mirad, viene entre las nubes: todos lo verán con sus ojos, también aquellos que lo traspasaron, y plañirán por él todas las razas de la tierra. Así es. Amén (Dn 7,13; Zac 12,10-14).
8 Yo soy el Alfa y la Omega, dice el Señor Dios, el que es y que era y que viene, el soberano de todo.

EXPLICACIÓN.

Diálogo entre el lector y la asamblea (cf. v.3: "el que lee y los que escuchan"). Saludo (4b-5a); El que es, que era y que viene (1,8; 4,8; cf. Is 41,4): el autor amplía, abarcando el pasado y el futuro, la fórmula de Éx 3,14 ("Yo soy el que soy"); el que viene, en lugar de "el que será", que describiría la eternidad de Dios en sí, indica que Dios no es meramente trascendente repecto a la historia humana, sno que está presente y activo en ella; su venida es continua y se realiza en la de Jesús (v.7). Los siete espíritus (cf. 3,1; 4,5; 5,6), la totalidad o plenitud del Espíritu, presente en Jesús Mesías (cf. Jn 18,37; 1 Tim 6,13); su testimonio culmina en su muerte. Primero en nacer de la muerte (cf. Col 1,18); soberano, etc. (cf. Rom 14,9) preludia el tema del libro, que trata de la caída de los imperios (4-5a).

Respuesta de la asamblea (5b-6): doxología dirigia a Jesús mesías. Doble fruto de la muerte de Jesús, suprema manifestación de su amor: liberar a los hombres del pasado que pesaba sobre ellos y constituirlos en un estado nuevo y excelente; linaje real y sacerdotes, modo describir los efectos de la comunicación del Espíritu; linaje real expresa la participación de la realeza/condición divina; sacerdotes, que la cercanía a Dios, antes atribuida a grupos privilegiados, es ahora patrimonio de todo cristiano (cf. Éx 19,6; 1 Pe 2,5).

Continúa el lector (7): la venida entre las nubes (cf. Mc 13,16 parr.; Dn 7,13), equivalente de triunfo, no es única. Aunque en el libro el curso de la historia se condensa en un solo caso, el proceso de la caída de Roma, se le ve como paradigma de la liberación progresiva de la humanidad. Que lo traspasaron, etc., cf. Zac 12.10.12.14; Jn 19,37; Mt 24,30. Respuesta de la asamblea: Así es. Amén.

Lector: El Alfa y la Omega, el principio y el fin (cf. Is 44,6). Estilo profético. Los nombres de las letras griegas muestran que, aunque el autor es de cultura hebrea, escribe para cristianos helenistas (8).

Evangelio: Juan 18:33-37

La realeza de Jesús.

(Jn 18,33-38a)

33. Entró de nuevo Pilato en la residencia, llamó a Jesús y le dijo:
-¿Tú eres el rey de los judíos?
34. Contestó Jesús:
-¿Dices tú eso como cosa tuya o te lo han dicho otros de mí?
35. Replicó Pilato:
-¿Acaso soy yo judío? Tu propia nación y los sumos sacerdotes te han entregado a mí. ¿Qué has hecho?
36. Contestó Jesús:
-La realeza mía no pertenece al orden este. Si mi realeza perteneciera al orden este, mis propios guardias habrían luchado para impedir que me entregaran a las autoridades judías. Ahora que mi realeza no es de aquí.
37. Le preguntó entonces Pilato:
-Luego ¿tú eres rey?
Contestó Jesús:
-Tú lo estás diciendo, yo soy rey. Yo para esto he nacido y para esto he venido al mundo, para dar testimonio en favor de la verdad. Todo el que pertenece a la verdad escucha mi voz.

Explicación.

Pilato entra en su residencia, donde se encuentra al abrigo de la presión judía (33). Jesús ha sido detenido como “el Nazareno” (18,5.7), es decir, como el pretendiente al trono de David. Pilato quiere informarse de primera mano. El pagano no dice “el rey de Israel” (1,49; 12,13), sino el rey de los judíos, de la nación; implicación mesiánica (¿Tú eres?). Jesús quiere que Pilato razone su postura, que examine si está siendo manipulado y considere su responsabilidad como juez (34).

Pilato no quiere reconocer la presión de los judíos y niega que la cuestión le afecte personalmente (35). Rechaza toda responsabilidad; son otros los acusadores, los jefes religiosos y, detrás, el pueblo que no ha sabido optar por Jesús y en contra de sus autoridades opresoras (12,34). Los títulos de Jesús no interesan a Pilato, pero si su actividad (¿Qué has hecho?), que puede suponer una amenaza para el poder que representa.

Jesús no responde directamente a la segunda pregunta de Pilato, sino a la primera: “¿Tú eres el rey de los judíos?” (36). Afirma claramente su calidad de Rey, pero niega todo parecido con los reyes que Pilato conoce. Al descartar la realeza que se apoya en la fuerza queda patente que no pretende ocupar el trono y que no es un rival del emperador. Él practica el servicio a los hombres y rechaza el poder. Los reyes del mundo imponen su dominio. Para Jesús, la violencia pertenece a la esfera de la injusticia. Él se ha entregado voluntariamente y ha cortado en seco la violencia de Pedro (18,11). Ha probado no ser rey como los otros.
 
Extrañeza de Pilato (37) y nueva afirmación de Jesús. Explica su función como rey: no dominar, sino dar testimonio de la verdad; con estas palabras condensa el significado de su vida y actividad. Jesús comunica vida (Espíritu) y la experiencia de esa vida es la verdad sobre Dios/el Padre, que se manifiesta como amor sin límite, y sobre el hombre, llamado a ser hijo de Dios. Su muerte en cruz, máxima expresión de amor, resumirá y hará culminar todo su testimonio. Los que están a favor de la vida/verdad, de la plenitud humana, responden a su llamada. 

SÍNTESIS.

El poder/dominio y el uso de la violencia pertenecen al orden injusto, enemigo de Dios y del hombre. Para realizar su obra, la nueva humanidad y la sociedad alternativa, Jesús no se apoya en la fuerza, sino en el deseo y la experiencia de vida; los que lo sigan, lo harán libremente.

20 DE NOVIEMBRE

 PRIMERA LECTURA. 1 Macabeos 6,1-13.

1El rey Antíoco recorría las provincias del norte cuando se enteró de que en Persia había una ciudad llamada Elimaida, famosa por su riqueza en plata y oro, 2con un templo lleno de tesoros; escudos dorados, lorigas y armas dejadas allí por Alejandro, el de Filipo, rey de Macedonia, que había sido el primer rey de Grecia. 3Antíoco fue allá e intentó apoderarse de la ciudad y saquearla; pero no puedo, porque los de la ciudad, dándose cuenta de lo que pretendía, salieron a atacarle. 4Antíoco tuvo que huir, y emprendió el viaje de vuelta a Babilonia, apesadumbrado.
5Entonces llegó a Persia un mensajero con la noticia de que la expedición militar contra Judá había fracasado. 6Lisias, que había ido como caudillo de un ejército poderoso, había huido ante el enemigo; los judíos, sintiéndose fuertes con las armas y pertrechos, y el enorme botín de los campamentos saqueados, 7habían derribado el ara sacrílega construida sobre el altar de Jerusalén, habían levantado en torno al santuario una muralla alta como la de antes, y lo mismo en Betsur, ciudad que pertenecía al rey.
8Al oír este informe, el rey se asustó y se impresionó, de tal forma que cayó en cama con una gran depresión, porque no le habían salido las cosas como quería. 9Allí pasó muchos días, cada vez más deprimido. 10 Pensó que se moría, llamó a todos sus grandes y les dijo:
-El sueño ha huido de mis ojos. Me siento abrumado de pena y me digo: 11"¡A qué tribulación he llegado, en qué violento oleaje estoy metido, yo, feliz y querido cuando era poderoso!" 12Pero ahora me viene a la memoria el daño que hice en Jerusalén, robando el ajuar de plata y oro que había allí y enviando gente que exterminase a los habitantes de Judá sin motivo. 13Reconozco que por eso me han venido estas desgracias. Ya veis, muero de tristeza en tierra extranjera.

Explicación.

La muerte del perseguidor se prestaba a una patética elegía, al estilo de Is 14 o Ez 32; el autor de 2 Mac la ha explotado al máximo. Nuestro narrador se contenta con un breve discurso, un poco teatral, del rey moribundo. Su confesión no significa verdadera conversión, es solamente el reconocimiento tardío del propio fracaso culpable. Y la culpabilidad reconocida duplica el dolor del fracaso, según la doctrina tradicional (por ejemplo, Sal 70).

Narrativamente han sucedido dos situaciones semejantes, dos intentos de saquear templos. El segundo intento ha fracasado, el primero tuvo éxito. El rey reconoce que el primero ha sido la causa de sus desgracias. Es la perspectiva del autor; pues los saqueos de templos era cosa ordinaria. Históricamente es cierto que la agresión contra el templo judío desencadenó la resistencia y la rebelión, con los sucesivos reveses para la monarquía seléucida. El autor quiere que veamos en este desarrollo histórico la dirección y el castigo de Dios. Porque, en su relación con el pueblo escogido, se deciden los destinos de los reyes.
Antíoco no se ha enfrentado personalmente con Judas y los suyos, se ha enfrentado con Dios, y Dios castiga su arrogancia.

6,1 El comienzo empalma directamente con 3,37, que hablaba de la partida del rey para Oriente. Elimaida era más bien una región, el antiguo Elam.

6,2 La noticia sugiere que Alejandro había respetado el templo y lo había enriquecido con sus exvotos. Pero notemos que se trata de informaciones comunicadas al rey, en las que había cabida para la leyenda.

6,3 El libro de 2 Mac explota el tema del saqueo de templos en la narración (cap.3) y en el prólogo (cap.1). La acumulación de tesoros en los templos es fenómeno constante de la religión. En la resistencia de la población se aunaban los motivos religiosos y los políticos; y Antíoco no quiso arriesgarse en un asalto a una ciudad.

6,7 Naturalmente el adjetivo "sacrílega" del ara es lenguaje del autor, no del que informa a Antíoco.

6,8 La restauración del templo y la construcción de la muralla simbolizan el fracaso de la política de unificación cultural: Antíoco juzga lo mismo que el narrador. Los dos verbos predicados del rey recuerdan la fórmula de Sal 48,6: "al verla quedaron aterrados y huyeron despavoridos".

6,10 Sobre el insomnio, véase la expresión de Dn 2,1; con otra fórmula, Sal 76.

6,13 Morir en tierra extranjera es una desgracia redoblada (véase, por ejemplo, Am 7,17).

SALMO. 9,2-4.6.16.19.

A 2 Te doy gracias, Señor, de todo corazón
Contando todas tus maravillas;
3 Quiero festejarte y agasajarte
tañendo en tu honor, Altísimo.
B 4 Porque mis enemigos retrocedieron,
tropezaron y perecieron en tu presencia.
G 6 Reprendiste a los paganos,
destruiste al malvado
borrando su apellido para siempre.
T 16 Se han hundido los paganos
en la fosa que hicieron,
en la red que escondieron su pie quedó prendido.
K 19 pues no se olvida para siempre del pobre,
su esperanza nunca se frustrará.

Explicación.

9,2-3 Introducción convencional de himno en tono jubiloso.

9,4-5 Invierte el orden cronológico para remontarse del hecho a la causa: derrota – juicio – juez. Se establece el tema forense conductor.

9,6.8 Invierto el orden para respetar el artificio alfabético. Se llega a la sentencia, que opone la extinción de los malvados al reino perpetuo del Señor.

9,16-17 En imagen convencional de caza enuncia el castigo inminente de los malvados: su maldad se vuelve contra ellos. Véanse p. ej. Prov 26,27; Sal 35,7s; 57,7.

9,19 Aunque dé largas, no es para siempre. En última instancia el desgraciado no fracasa.

EVANGELIO. Lucas 20,27-40.

27 Se acercaron entonces unos saduceos, de esos que niegan la resurrección, y le propusieron
28 este caso:
- Maestro, Moisés nos dejó escrito: "Si a uno se le muere su hermano, dejando mujer pero no hijos, cásese con la viuda y dé descendencia a su hermano".
29 Bueno, pues había siete hermanos: el primero se casó y murió sin hijos.
30 El segundo,
31 el tercero y así hasta el séptimo se casaron con la viuda y murieron también sin dejar hijos,
32 finalmente murió también la mujer.
33 Pues bien, esa mujer, cuando llegue la resurrección, ¿de cuál de ellos va a ser mujer, si ha sido mujer de los siete?
34 Jesús les respondió:
- En este mundo, los hombres y las mujeres se casan;
35 en cambio, los que han sido dignos de alcanzar el mundo futuro y la resurrección, sean hombres o mujeres, no se casan;
36 es que ya no pueden morir, puesto que son como ángeles, y, por haber nacido de la resurrección, son hijos de Dios.
37 Y que resucitan los muertos lo indicó el mismo Moisés en el episodio de la zarza, cuando llama al Señor "el Dios de Abrahán y Dios de Isaac y Dios de Jacob".
38 Y Dios no lo es de muertos, sino de vivos; es decir, para él todos ellos están vivos".
39 Intervinieron unos letrados:
- Bien dicho, Maestro.
40 Porque ya no se atrevían a hacerle más preguntas.

EXPLICACIÓN

Vse. Mc 12,18-27. Los círculos del poder económico y religioso (saduceos: sumos sacerdotes y senadores) aparecen como radicalmente materialistas. No esperando otra vida, su objetivo es pasar la presente en posición de privilegio, sin detenerse ante la explotación del pueblo (19,46: "cueva de bandidos").

Ante la aprobación de los letrados (fariseos), Jesús se encara con ellos (39-41). 

19 DE NOVIEMBRE

PRIMERA LECTURA. 1 Macabeos 4,36-37.52-59.

36Judas y sus hermanos propusieron:
-Ahora que tenemos derrotado al enemigo, subamos a purificar y consagrar el templo.
37Se reunió toda la tropa, y subieron al monte Sión. 
52El año ciento cuarenta y ocho, el día veinticinco del mes noveno (diciembre), 53madrugaron para ofrecer un sacrificio, según la Ley, en el nuevo altar de los holocaustos recién construido. 54En el aniversario del día en que lo habían profanado los paganos lo volvieron a consagrar, cantando himnos y tocando cítaras, laúdes y platillos. 55Todo el pueblo se postró en tierra, adorando y alabando a Dios, que les había dado éxito.
56Durante ocho días celebraron la consagración, ofreciendo con júbilo holocaustos y sacrificios de comunión y de alabanza. 57Decoraron la fachada del templo con coronas de oro y rodelas. Consagraron también el portal y las dependencias, poniéndoles puertas. 58El pueblo entero celebró una gran fiesta, que canceló la afrenta de los paganos.
59Judas, con sus hermanos y toda la asamblea de Israel, determinó que se conmemorara anualmente la nueva consagración del altar, con solemnes festejos, durante ocho días, a partir del veinticinco de diciembre.

Explicación.

4,36 1 Mac 1,8; 2 Cr 29.

4,52-54 Tres años exactos marcan el tiempo de la cólera. Véase 2 Sm 24,13, sobre los castigos presentados a elección a David. En contraste, la falsa profecía de Ananías: "Antes de dos años" (Jr 28,3). 2 Mac 10,3 reduce el tiempo a dos años para adelantar la muerte de Antíoco; Dn 7,25 y 9,27 hablan de tres años y medio.

SALMO: 1 Crónicas 29,10-12.

10Entonces bendijo al Señor en presencia de toda la comunidad y dijo:
-Bendito seas, Señor, Dios de nuestro padre Israel, desde siempre y para siempre. 11A ti, Señor, la grandeza, el poder, el honor, la majestad y la gloria, porque tuyo es cuanto hay en el cielo y tierra. 12Tuyo el reino y el que está por encima de todos. Riqueza y gloria vienen de ti. Todo lo gobiernas. En tus manos están la fuerza y el poder, en tus manos engrandecer y fortalecer a quienes quieras.

Explicación.

29,10 Al principio nombra al patriarca Israel; al final, a los tres patriarcas, en inclusión poco marcada.

29,11 Empieza con el reconocimiento (que inspirará diversos himnos insertos en el Apocalipsis del NT). El "reino y el qu está por encima" son la nación israelita y su rey; son la posesión particular del Señor en la tierra. Por tanto, el reino no es propiedad del rey, sino que, referidos ambos a Dios, muestran una diferencia muy relativa.

29,12 Dios comunica a otros de lo suyo, eligiendo hombres y manteniendo la soberanía de la historia. (Se evita el título de "rey" para el hombre y para Dios; no así en el salmo citado en el cap. 16).

EVANGELIO. Lucas 19,45-48.

45 Entró en el templo y se puso a echar a los vendedores,
46 diciéndoles:
- Escrito está: Mi casa será casa de oración, pero vosotros la habéis convertido en una cueva de bandidos.
47 Todos los días enseñaba en el templo. Por su parte, los sumos sacerdotes y los letrados trataban de acabar con él, y lo mismo los notables del pueblo,
48 pero no encontraban modo de hacer nada, porque el pueblo entero lo escuchaba pendiente de sus labios.

EXPLICACIÓN.

Entrada en el templo. El viaje termina en el templo, centro y compendio de la ciudad (45). Denuncia que cumple el texto de Zac 14,21: "Y ya no habrá mercaderes en el templo del Señor ..., en aquel día" (46). El templo, infiel a su función (Is 56,7; Jr 7,11). Su fin será la destrucción (Jr 7,19s). 

Sexta sección del Evangelio (19,47-21,38). Enseñanza polémica en el templo. La sección está enmarcada por las dos menciones de la enseñanza y del pueblo (19,47s; 21,37s).

19,47s. Introducción. Contrariamente a lo propuesto en la tercera tentación (4,9s), la manifestación de Jesús en el templo no se hace de manera espectacular, sino por medio de la enseñanza. El interés del pueblo por la enseñanza de Jesús impide actuar a los dirigentes.

18 DE NOVIEMBRE

 PRIMERA LECTURA. Hechos 28,11-16.30-31.

11 Al cabo de tres meses zarpamos en una nave de Alejandría que había invernado en la isla y llevaba por mascarón a los Dióscoros.
12 Tocamos en Siracusa y nos detuvimos tres días;
13 desde allí, costeando, arribamos a Regio. Al día siguiente se levantó viento sur, y llegamos a Pozuelos en dos días.
14 Encontramos allí hermanos y fuimos invitados a pasar siete días con ellos, y finalmente llegamos a Roma.
15 También allí los hermanos, que tenían noticia de nuestras peripecias salieron a recibirnos al Foro Apio y las Tres Tabernas. Al verlos, Pablo dio gracias a Dios y cobró bríos.
16 Una vez entrados en Roma, le permitieron a Pablo tener su propio domicilio con un soldado que lo vigilase.
30 Permaneció allí dos años enteros a su propia costa, recibiendo a todos los que acudían a él, 
31 predicando el reinado de Dios y enseñando lo concerniente al Señor Jesús con toda valentía, sin impedimentos.
 
EXPLICACIÓN.

11 - 16.      Salida para Italia. Llegada a Pozuelos (Pozzuoli), estancia con la comunidad cristiana allí existente y arribo a Roma (11-14), donde son bien acogidos por la comunidad local (15). Prisión atenuada de Pablo y desaparición definitiva del "nosotros" (16).

                  Éstos aparecieron por primera vez cuando se anunció la travesía hacia Europa (16,10). (En la rec. occ. se anticipa su presentación en 11,28.). A partir del momento en que Pablo se ha visto privado de la presencia profética de Bernabé y no obstante el gran rodeo que ha hecho dar a la misión, por haber resuelto enfrentarse con la institución judía de Jerusalén 8cf. 19,21b) contra el parecer del Espíritu Santo  (cf. 19,21c; 20,3 var.; 20,23; 21,4.10-12), el grupo del "nosotros" se ha mantenido a su lado o al margen marcando con su presencia o ausencia si el camino elegido por él era recto o equivocado.

                 Ahora, una vez que Pablo ha alcanzado Roma, objetivo que le había fijado el designio divino (cf. 19,21c; 23,11), el grupo del Espíritu se separa de él definitivamente, a la manera como el ángel liberador se aparta de los personajes a quienes ayuda a liberarse (cf. 12,7-19). Dicho objetivo, Roma, viene expresado también mediante circunlocuciones tales como el "César" (27,24), "el tribunal del César" (25,10), "la apelación al César" (25,11.12.21.25; 26,32; 28,19) o la declaración por parte de Pablo de su verdadera identidad "romana" (16,37.38; 22,25.26.27.29; 23,27); todos estos términos designan al mundo pagano, campo de misión que había sido asignado a Pablo (cf. 13,47; 22,21; 26,17s) y que debía haber sido el suyo desde un principio.

28,30S.       La tercera vez que Pablo afirma solemnemente que desde ahora se dirige a los paganos 8cf. 13,46; 18,6; 28,28) lo cumple a la letra (30). La frase decisiva es la que cierra el libro: "con toda libertad/valentía", efecto del Espíritu (cf. 4,29), "sin impedimento" (31), por haber renunciado a su nacionalismo judío, el máximo obstáculo que se había interpuesto constantemente en su labor misionera. Ahora alcanza toda su talla de apóstol.

                   Una vez que los personajes más representativos de las principales tendencias han alcanzado el ápice de su liberación personal, poniendo todas sus facultades y actividad al servicio del mensaje universalista de Jesús, Lc deja de hablar de ellos. (Así, Felipe, portavoz del grupo helenista, desaparece de escena en 8,40, reapareciendo en 21,8s a la cabeza de la comunidad paganocristiana de Cesarea; Pedro, portavoz del grupo hebreo/apostólico, sale de escena en 12,17, reapareciendo en 15,7-11 para defender la causa de los paganos.) Por eso, una vez que Pablo ha alcanzado su plena madurez de apóstol, Lc puede concluir el segundo libro. Ya no hace falta hablar más de él, pues está perfectamente en línea con el mensaje de Jesús (primer libro).  

SALMO. 98,1-6.

(Sal 96; Is 40-55) 

1Cantad al Señor un cántico nuevo 
porque ha hecho maravillas;
su diestra le ha dado la victoria,
su santo brazo.
2EI Señor da a conocer su victoria,
revela su justicia a la vista de los pueblos. 
3Se acordó de su lealtad y fidelidad
para la Casa de Israel.
Los confines de la tierra han contemplado 
la victoria de nuestro Dios.
4Vitorea al Señor, tierra entera,
gritad, aclamad, tañed:
5tañed la cítara para el Señor
la cítara al son de instrumentos. 
6Con clarines y al son de trompetas 
vitoread ante el Señor y Rey. 
Explicación.
98 GéneroHimno a la realeza del Señor, gemelo del Sal 96 y miembro de la serie homogénea 93-99. Las relaciones, a veces identidad, con Isaías 11 son patentes, especialmente Is 52,7-10; 42,10-12; es conocido en el mismo autor el interés por la novedad de los sucesos y del anuncio. El verbo "gritad"(psh, 4) sólo figura aquí y en Is 40-55.
En la perspectiva histórica propuesta, interpreto así el salmo: El Señor Dios de Israel, que parecía vencido por los dioses de Babilonia, ha conseguido la "victoria": ha sido patente en el ámbito internacional (2). Ahora, con los suyos rescatados, vuelve (9) a su capital y su palacio, como rey triunfante, para tomar posesión de su legítimo reino universal (10). Israel es el primer beneficiario, los pueblos contemplan, la naturaleza se suma a la fiesta.
Composición. Atendiendo al esquema típico de imperativo y motivación, el salmo procede en dos ondas desiguales: invitación (1 a), motivación (1 b-3); invitación a la orquesta (4-6), invitación a la naturaleza (7-8), motivación (9). Es manifiesta la asimetría, provocada por la amplificación instrumental y la llamada a la creación. Reducido a esquema el argumento suena así: una vez ganada la victoria, el rey viene para instaurar un gobierno de justicia. Puede compararse con las situaciones de Saúl (1 Sm 8,20; 10,24), David (1 Sm 5,2).
98,1 Ap 5,9; 14,3.
98,1-3 Notamos una "victoria" singular y "maravillas" plurales. La explicación está en el "recuerdo" del Señor, el cual ha sido coherente con su modo de proceder, ha mantenido su "lealtad". La acción ha sido a favor de Israel y "justa", la manifestación es universal: Israel es escenario de la actuación de Dios.
98,4-6 En la música instrumental y vocal reconoce el salmista un acto superior de alabanza. La vocal exalta la palabra, intensifica la expresión; la instrumental templa y acuerda los sonidos naturales. 
Transposición cristiana.
El tema del "venir" se realiza en el "adviento", en el Mesías "que ha de venir"; doble adviento, histórico y escatológico; ambos celebrados en nuestro adviento litúrgico. El segundo tema es el reinado, dominante en el NT: universal y justo. Al "cántico nuevo" se refiere Ap 5,9s.  
EVANGELIO. Mateo 14,22-33.
22 Enseguida obligó a los discípulos a que se embarcaran y se le adelantaran a la otra orilla, mientras él despedía a las multitudes.
23a Después de despedirlas subió al monte para orar a solas.
23b Caída la tarde, seguía allí solo. 
24 Mientras tanto la barca iba ya muy lejos de tierra, maltratada por las olas, porque llevaba viento contrario.
25 De madrugada se les acercó Jesús andando sobre el mar.
26 Los discípulos, viéndolo andar sobre el mar se asustaron diciendo que era un fantasma, y daban gritos de miedo.
                  27 Jesús les habló enseguida:
                  - ¡Ánimo, soy yo, no tengáis miedo!
                  28 Pedro le contestó:
                  - Señor, si eres tú, mándame llegar hasta ti andando sobre el agua.
                  29 Él le dijo:
                  - Ven.
                  Pedro bajó de la barca y echó a andar sobre el agua para llegar hasta Jesús;
30 pero al sentir la fuerza del viento le entró miedo, empezó a hundirse y gritó:
                 - ¡Sálvame, Señor!
                 31 Jesús extendió en seguida la mano, lo agarró y le dijo:
                 - ¡Qué poca fe! ¿Por qué has dudado?
                 32 En cuanto subieron a la barca cesó el viento.
                 33 Los de la barca se postraron ante él diciendo:
                 - Realmente eres Hijo de Dios.
 EXPLICACIÓN.
Aleja a los discípulos del contacto con la multitud, para evitar el falso mesianismo triunfal (22). Primera mención de la oración de Jesús (cf. 26,36ss) (23a). 
23B - 33.     La barca, figura de la comunidad; a la otra orilla: a país pagano; el viento contrario: la resistencia de los discípulos a alejarse del lugar donde está la esperanza de un triunfo. Andar sobre el agua, privilegio divino (Job 9,8; 38,16) (25). Reacción: incredulidad (fantasma), no reconocen al Hombre-Dios (1,23). Soy yo (27), fórmula de identificación divina (Éx 3,14; Is 43,1.3.10s). Desafío de Pedro (28). Señor, mándame, quiere andar sobre el agua, participar de la condición divina de Jesús, pero como milagro, no por su entrega personal. Esperaba lograrlo sin obstáculos; ha olvidado que el hombre se hace hijo de Dios en medio de la oposición y persecución (5,10s).

17 DE NOVIEMBRE

Primera Lectura: Eclesiástico 26:1-3, 15-18, 24 o I Timoteo 5,3-10.

ECLESIÁSTICO.

1Dichoso el marido de una mujer buena:
se doblarán los años de su vida.
2Mujer hacendosa hace engordar al marido,
y lo hará feliz toda su vida.
3Mujer buena es buen partido
que recibe el que teme al Señor:
15mujer recatada duplica su encanto: 
no tiene precio un ánimo dueño de sí. 
16El sol brilla en el cielo del Señor,
la mujer bella en su hogar bien arreglado; 
171ámpara que luce en candelabro sagrado
es un rostro hermoso sobre un tipo esbelto; 
18columnas de oro sobre plintos de plata
son piernas esbeltas sobre pies hermosos.
24mujer desvergonzada se dedica a la infamia,
joven pudorosa se cohíbe incluso ante el marido; 

Explicación.

26,1-4 La visión negativa no es lo último: aunque más breve, esta estrofa quiere contrarrestar lo anterior. El original adopta una posición enfática:, "Mujer buena: ¡dichoso su marido!"; véase Prov 12,3; 18,22.  

26,13-15 Tres virtudes sapiencia les: prudencia, discreción, instrucción. La belleza está aquí más valorada que en Prov 31,30, sin que alcance el valor sumo.

26,16-18 La mujer hermosa se compara a lo más noble y luminoso en la naturaleza y el culto: en su casa irradia luz y orden, su figura tiene algo de sagrado, es una fantasía de riqueza esplendente. Hay que recordar lo que el autor sabe decir del sol y del culto en los últimos capítulos del libro, para apreciar el valor de estos tres versos; también se puede recordar la belleza masculina del sol en Sal. Compárese el v. 18 con Sal 144,12. 26,19-27 Diez versos de exhortación que insisten en los mismos temas y oposiciones; se leen en algunos manuscritos griegos.

26,23-26 Por oposiciones no muy felices. Lo interesante es el sentido religioso explícito e intenso: la descripción sapiencial culmina en parénesis religiosa. Dos veces suena el tema del temor de Dios enunciado en v. 3.



3El subsidio de viuda dáselo a las viudas de verdad; 4pero si una viuda tiene hijos o nietos, que aprendan éstos  primero a querer a su familia y a corresponder por lo que han recibido de sus padres. Esto es lo que agrada a Dios.
                         5La viuda de verdad, la que está sola en el mundo, tiene puesta su esperanza en Dios y se pasa el día y la noche pidiendo y rezando. 6En cambio, la frívola ha muerto en vida. 7Insiste en estas cosas para que sean intachables. 8Quien no mira por los suyos, y en particular por los de su casa, ha renegado de la fe y es peor que un descreído.
                         9No inscribas en la lista a una viuda de menos de sesenta años; 10tiene que haber sido fiel a su marido y estar recomendada por sus buenas obras: si ha criado bien a sus hijos, si ha ejercitado la hospitalidad, si ha lavado los pies a los consagrados, si ha ayudado a los que sufren, en fin, si ha aprovechado toda ocasión de hacer el bien.

Explicación.

La primera advertencia está en relación con la juventud de Timoteo (cf. 4,12). Avisos respecto a las viudas y al subsidio que les procuraba la comunidad. Existía una lista o registro de viudas que ejercían una función en la iglesia (9). Lavar los pies (9), acto de hospitalidad.


4 que mi peña y alcázar eres tú:
por tu nombre dirígeme y guíame;
5 sácame de la red que me han escondido,
que tú eres mi amparo.
8 Festejaré, celebraré tu lealtad,
pues te fijaste en mi aflicción
velaste por mi vida en peligro.
9 No me entregaste en poder del enemigo,
colocaste mis pies en terreno espacioso.
20 Qué bondad tan grande
reservas a tus fieles
y despliegas, a la vista de toos,
con los que a ti se acogen.
24 Amad al Señor, sus leales,
pero paga con creces
a quien obra con soberbia.
25 ¡Sed valientes y animosos
los que esperáis en el Señor!

Explicación.

31, 2b-5. Se adensa la súplica en siete imperativos de liberación y cuatro sustantivos que componen un espacio metafórico militar o cinegético. El orante se imagina como animal indefenso, acosado por cazadores que intentan matarlo; salta a una peña, busca una roca, cae en la red; alguien lo saca y conduce a lugar seguro (véase v.9). Cabe también la imagen militar recordando las aventuras de David huido por las montañas: 1 Sm 22,4s; 24,23. El paso de una imagen a otra es fluido, las imágenes pierden precisión. "Por tu nombre": puede ser también título o fama; el orante no alega méritos propios, sino peligros, y la fama o prestigio de Dios.

31,6-9. Los verbos del orante. El hifil de pqd es confiar un depósito a un guardián (Lv 5,21.23). Implica que el guardián es fiel (6b) y que uno se fía de él (7b). El orante deposita, no una propiedad preciosa, sino el "aliento" o vida o espíritu (cfr. Nm 27,16). En fuerte contraste están (a la letra) "quienes guardan soplos vanos" (Jn 2,9). Con los verbos del Señor podemos componer una secuencia: libró - se fijó - se ocupó no entregó - estableció. Verbos ricos de paralelos. P. ej. "fijarse en la aflicción": Ex 3,7; 4,31; Dt 26,7; "entregar en poder" 1 Sm 23,11 "establecer", con resonancia de nombrar: Sal 18,34; 30,8. El "espacio" se opone a la estructura (de 8b y 10a). Llamar a los ídolos "soplos" se encuentra en Dt 32,21 y es corriente en Jr.

31,20-21 En cuatro versos se remonta el orante a una reflexión general en tono admirativo. Domina el tema de guardar, esconder, ocultar, con el correlativo refugiarse y el sustantivo tienda o choza: datos que convergen hacia el templo. Sólo que personalizados: es el asilo "de tu rostro". La "gran bondad": en términos personales evoca la revelación de Ex 33,19; en términos objetivos son los bienes del templo: Sal 65,5. La bondad de Dios se limita a algunos beneficiarios; pues es claro que uno se refugia perseguido, amenzado por otros: "conjuras y pendencias".

31,24 De la acción de gracias salta a la parénesis, apoyando la invitación en un enunciado genérico sobre la actividad retributiva de Dios. El salmo concluye con el amor y la esperanza. "Amad al Señor": en esta forma sólo se lee aquí; en formas semejantes, Sal 18,2; 116,1 y el clásico Dt 6,5. "Animosos y valientes" es endíadis conocida de ordinario referida a una empresa: Dt 31,7.23; Jos 1,6.7.9.18. La esperanza es dinámica: influye en el talante y la acción.

TRANSPOSICIÓN CRISTIANA.

El salmo se ha hecho famoso porque el v.6 lo pone Lucas en boca de Cristo agonizante (23,46) y luego en boca de Esteban mártir (Hch 7,59). Dios recibe en depósito una vida, que no se perderá. En la misma línea se puede leer el v.16, y de ahí se extiende a la lectura cristológica y eclesiológica; sólo que corrigiendo el v.18, pues ni Jesús ni esteban piden la muerte de sus enemigos.

Evangelio: Mateo 25:31-40

31Cuando el Hombre llegue en su gloria acompañado de todos sus ángeles, se sentará en su trono real y reunirán  ante él a todas las naciones. El separara a unos dotros, como un pastor separa las ovejas de las cabras, 33y pondrá a las ovejasu derecha y a las cabras a su izquierda. 34Entonces dirá el rea los de su derecha:
-Venid, benditos de mi Padreheredad el reino preparado para vosotros desde la creación del mundo35Porquetuve hambre y me disteis de comertuve sed me disteis de beber, fuforastero me recogisteis, 36estuve desnudo y me vestisteis, enfermo y me visitasteisestuve en la cárcel y fuisteis a verme.

37Entonces los justos replicarán:

-Señor, ¿cuándo te vimos con hambre te dimos de comer o con sed te dimos de beber? 38 ¿Cuándo llegaste como forastero y te recogimos desnudo y te 

vestimos? 39¿Cuándo estuviste enfermo o en la cárcel y fuimos a verte?

40Y el rey les contestará: 

-Os lo aseguro: Cada vez que lo hicisteis con uno de esos hermanos míos tan
 
insignificantes lo hicisteis conmigo.


Explicación.

Escena complementaria de «la llegada» descrita en 24,30s. Allí, como salvación para los suyos; aquí se explica la suerte de los paganos (24,30: todas las tribus de la" tierra; 25,32:  todas las naciones); en ambos casos, llegada del Hombre acompañado de sus ángeles. 

Época histórica después de la destrucción de Jerusalén (24,29). No juicio de los judíos 

(19,28), sino únicamente de los paganos. El rey, época del reinado del Hombre (13,41),

 que se inaugura con la destrucción de Jerusalén (16,28) y dura hasta el fin de esta edad. 

La suerte de los paganos depende de cuál haya sido su actitud con los más desvalidos (34-36), con quienes se identifica Jesús (40). 

31 DE DICIEMBRE

Primera  Lectura de la 1ª carta de san Juan 2,18-21: 18Hijos, es un momento decisivo. ¿No oísteis que iba a venir un anticristo? Pues mirad ...